¡El pasado sábado tuvimos una fantástica jornada cultural organizada por la SVEA!
Castro de Troña, un enclave mágico entre la niebla.
Empezamos el día visitando uno de los lugares de residencia de nuestros ancestros, el Castro de Troña, en el que Damián nos hizo de guía dándonos todo tipo de detalles sobre la vida de los Castrexos y el motivo de sus viviendas circulares. Ppudimos ver la misteriosa Serpe de Troña, un petroglifo ubicado en la cara vertical de una roca dentro de la construcción castrense.
Pena do Equilibrio, la curiosidad geológica de Ponteareas.
¡De allí nos dirigimos luego a la Pena do Equilibrio! Un fantástico monumento natural en el medio del bosque de la Picaraña, donde pequeños y mayores intentaron resolver el secreto de las piedras y su particular posición.
Visitamos un castillo con mucha historia.
Como gran atracción de la velada: La visita cultural al Castillo de Sobroso.
Saqueado por Almanzor, lugar de encarcelamiento de la reina Urraca, caido por las guerras Irmandiñas y reconstruido posteriormente por Pedro Madruga.
Divididos en dos grupos, y de la mano de dos guías del castillo, fuimos recorriendo las distintas estancias y conociendo a través de proyecciones la vida de Sobroso desde la época medieval, hasta el siglo XX con la recuperación de las ruinas del castillo realizada por Alejo Carrera Muñoz.
El museo vivo de la Casa Etnográfica Pazo da Cruz.
A media jornada hicimos el ágape con una magnífica comida para recuperar fuerzas y poder proseguir nuestras andainas por la Casa Museo Etnográfico Pazo da Cruz, en Covelo, en la que pudimos «viajar en el tiempo» y ver cómo vivían nuestros abuelos, guiados en todo momento por nuestro anfitrión, Maximino. Una visita de lo más enriquecedora, llena de objetos fantásticos y de la historia de estos mismos.
Para terminar la velada en la Casa Museo Pazo da Cruz, nuestros compañeros, Eva Cobián y Rodrigo Presa, ¡llevaron a cabo una escénica sorpresa! Con sus trajes de época, nuestros compañeros recrearon parte de la batalla final que ensayaron para este evento, llevándose los suspiros y los aplausos de los más pequeños, ¡y los más mayores!
Esperamos poder repetir pronto un evento como éste, ¡tan lleno de risas, alegría, bromas e historia!, donde todos volvimos a casa con algo aprendido y algo enseñado.
¡Porque en la SVEA… somos más que historia!
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